ABURRIDAS Y DESÉRTICAS EXPOSICIONES.

Se nos queja un tercer lector y ya tenemos constancia directa de hay tres personas que nos siguen, en este caso una amable lectora, se nos queja del tipo de exposiciones que pueden verse en las salas del Casal Pere Quart, concretamente en las salas que dan a la Rambla y pueden ser vistas incluso desde la calle.

Tales exposiciones, quitando aquellas realizadas por menores, el resto, salvo una o dos honrosas excepciones son una auténtica birria, nos dice nuestra amable lectora empleando una palabra algo más fuerte, y la prueba de ello es que, salvo el día de la inauguración, el compadreo y el copeo de cava, el resto de días en que dura la exposición no entran a verla ni los familiares de los supuestos “artistas”. 

A todas horas tales salas están vacías, sin público, y sin embargo los autores están  encantados de haberse conocido a sí mismos.

Y se pregunta nuestra amable lectora:

¿Acaso esta ciudad no tienen gente de valía joven y no tan joven que puedan exponer cosas interesantes que atraigan al público?

Seguro que hay mucha gente así, sin duda que hay mucha gente que hace cosas interesantes fuera de la aburrida y desértica monofocalidad expositiva del Casal Pere Quart.

Siempre se ha dicho que en épocas de crisis y decadencia sale ganando la creatividad, sin embargo, ese principio falla para nosotros, nuestra City desde el inicio del caso mercurio entró de lleno en la cuesta abajo de la decadencia y de la ciudad dormitorio, y a la creatividad, que sin duda la hay, parece que le cuesta acceder a los canales establecidos.

Por Antonio